Imagen de electrones secundarios de una muestra de NiO. Controlando los parámetros de crecimiento tales como tiempo, temperatura y flujo de argón, pueden llegar a diseñarse estructuras en la escala nano- y micrométrica con morfologías realmente asombrosas como la que se muestra en la imagen. Esta muestra ha sido crecida a 1200 ºC durante 10 horas bajo un flujo controlado de argón, empleando un método vapor-sólido.